Tras tres largos años de lluvias escasas en Oliete, por fin hemos recibido una cantidad significativa de agua que ha traído alivio, pero también nuevos desafíos. Desde enero de este año, solo habían caído unos 50 litros por metro cuadrado, un dato alarmante para los campos de olivos y huertas que dependen del agua para prosperar. Sin embargo, en la última semana hemos visto cómo las tormentas han descargado entre 125 y 200 litros por metro cuadrado, una cifra que marca un punto de inflexión.

Estas lluvias torrenciales, aunque esperadas, han llegado con una gran fuerza, y con ello, han provocado algunos problemas en Oliete. Riadas, el desbordamiento del río y campos anegados son algunas de las consecuencias que estamos gestionando. El agua ha corrido con tal intensidad que en algunas zonas ha inundado huertas y ha provocado daños en los caminos rurales. Es un recordatorio de que la naturaleza tiene su propio ritmo y que, aunque necesaria, a veces nos pone a prueba.

Las Consecuencias de la Sequía y el Alivio de las Lluvias

La sequía de los últimos años ha sido dura para nuestros olivos centenarios. Las escasas precipitaciones desde principios de año estaban empezando a afectar la salud de muchos de ellos, poniendo en riesgo la cosecha y, en algunos casos, la supervivencia de los olivos. Las lluvias recientes han sido un alivio para paliar el estrés hídrico acumulado, y nuestros olivos han recibido una inyección de vida que necesitaban desesperadamente. Una vida que se verá muy reflejada en la próxima campaña.

Pero como ocurre con las tormentas, el agua no siempre llega de la manera más suave. Las lluvias de tormenta tienden a concentrarse en poco tiempo, lo que provoca que, en lugar de filtrarse lentamente en la tierra, gran parte del agua acabe escurrida por la superficie, llevándose consigo parte del terreno y anegando ciertos campos.

Riego por Goteo: Una Solución para la Huerta

A pesar de estos desafíos, hay buenas noticias desde nuestras huertas. En los últimos tiempos, hemos trabajado en la instalación de un sistema de riego por goteo, lo que nos ha permitido gestionar mejor los efectos de la sequía. Gracias a esta tecnología, hemos podido garantizar un suministro constante y eficiente de agua para nuestros cultivos, manteniendo la huerta en condiciones óptimas incluso en los momentos más secos.

Este sistema nos ha permitido resistir mejor la falta de lluvias y, aunque los campos de olivos han sufrido más debido a la sequía, la huerta ha prosperado sin lluvias, aunque ahora haya sufrido algún daño, las plantaciones tenían el arraigo suficiente para poder seguir adelante. Aun así, las lluvias recientes han sido bienvenidas para complementar el riego artificial y permitir una regeneración natural del suelo.

La Importancia del Equilibrio y la Adaptación

El cambio climático nos recuerda una y otra vez que debemos estar preparados para enfrentar situaciones extremas: largos periodos de sequía seguidos de lluvias torrenciales. En Apadrinaunolivo.org, continuamos trabajando para encontrar el equilibrio entre la tradición y la innovación. Sabemos que los olivos centenarios que hemos recuperado necesitan agua para prosperar, pero también sabemos que debemos adaptarnos a las nuevas realidades climáticas.

Las tormentas pueden ser difíciles de gestionar, pero también nos ofrecen la oportunidad de reflexionar sobre nuestras prácticas y cómo podemos seguir cuidando este paisaje tan único.

Mirando al Futuro

Aunque las lluvias han sido un bálsamo para nuestros olivos, todavía queda trabajo por hacer. En Apadrinaunolivo.org estamos comprometidos a seguir innovando y buscando soluciones para que nuestros olivos y huertas puedan enfrentar futuros retos climáticos. Seguimos explorando métodos de cultivo más sostenibles y gestionando mejor los recursos hídricos, de manera que podamos seguir protegiendo y revitalizando este hermoso rincón de Oliete.

Agradecemos, como siempre, el apoyo de nuestras madrinas y padrinos. Juntos, seguiremos construyendo un futuro sostenible para nuestros olivos, nuestra huerta y nuestras comunidades.

Nicolas Lopez sancho